• Compartir
  • Whatsapp de SrPerro

La influencia del vínculo afectivo sobre el comportamiento de un perro no es igual si es un can adoptado, un perro de terapia o comprado

La influencia del vínculo afectivo sobre el comportamiento de un perro no es igual si es un can adoptado, un perro de terapia o comprado

Última actualización del articulo el día 11/09/2025

Un estudio del Instituto de Neurociencia Cognitiva y Psicología, Budapest (Kis et al., 2024) ha analizado cómo diferentes tipos de perros —comprados en un criador, adoptados en una protectora y los perros de terapia— responden a la influencia humana en una sencilla prueba de elección de comida.

El resultado parece muy interesante aunque la muestra sea posiblemente demasiado pequeña: los investigadores han comprobado que la historia de vida y el vínculo con las personas influyen mucho en el comportamiento de los perros.

Lógicamente, todos los perros se mostraron susceptibles a la influencia humana, pero no de la misma manera, mostrando que esa susceptibilidad social está modulada tanto por las interacciones inmediatamente previas a la prueba como por sus experiencias sociales a largo plazo.

En la prueba, los perros debían elegir entre dos platos con distinta cantidad de comida (1 frente a 8 croquetas). En condiciones normales, todos prefieren el plato con más comida. Pero en la fase de influencia humana, el experimentador mostraba entusiasmo por el plato más pequeño. El interés de los investigadores era comprobar hasta qué punto los perros cambiaban su elección tras distintos tipos de interacción social previa: con su tutor, con un extraño, siendo ignorados o tras una breve separación.

Perros de familia
En este grupo participaron 64 perros (comprados en un criador y viviendo en familia). Todos redujeron sus elecciones de la ración grande cuando había influencia humana, pero este efecto fue mucho mayor tras 10 minutos de juego y caricias con su tutor. Según el análisis, la diferencia entre la fase de base y la de influencia fue significativamente mayor con interacción del tutor frente a condiciones de control como ignorar (p = 0,050) o separación (p = 0,045). En cambio, la interacción con un extraño no mostró diferencias claras respecto a los controles

Perros adoptados de protectoras
Se estudiaron 28 perros adoptados de una protectora. También aquí se observó que eran susceptibles a la influencia humana (p < 0,001). Sin embargo, no hubo diferencias según quién les diera la interacción previa: respondieron de forma similar tras jugar con su tutor o con un extraño (p = 0,58). Esto indica que para ellos cualquier contacto humano positivo tenía el mismo valor

Perros de terapia
En este grupo participaron 27 perros (comprados en un criador responsable, según los autores del estudio). Los resultados fueron distintos: aunque también eran influenciados por el humano (p < 0,001), solo mostraron una diferencia clara tras la interacción con su tutor. La interacción con un extraño no aumentó su susceptibilidad, de hecho su respuesta fue comparable a la de los perros de familia en las condiciones de control. El efecto de la interacción previa fue significativo (p = 0,036), lo que refleja que en estos perros el vínculo con su tutor es determinante.

En resumen: los perros comprados en un criador que viven en familia dependen más del tutor, los adoptados valoran por igual el contacto humano, sea de su tutor o no, y los de terapia son especialmente sensibles a la relación con su tutor.

Los autores interpretan que estas diferencias reflejan la importancia del vínculo afectivo. La interacción con el tutor puede inducir liberación de oxitocina y aumentar la predisposición social, mientras que la interacción con un extraño no siempre produce ese efecto. En perros adoptados, es posible que valoren por igual el contacto humano debido a su historia, mientras que en los de terapia podría existir un efecto de habituación o incluso de estrés en las interacciones frecuentes con extraños.

Por eso mismo, los responsables del estudio subrayan la importancia de considerar el bienestar de los perros de terapia, dado que no siempre obtienen un refuerzo positivo de las interacciones con desconocidos.

 

Te puede interesar